La temporada de Orcas duró del 25 de julio al 22 de agosto, y pudimos observar a estos majestuosos delfines blancos y negros durante ocho días. Entre finales de julio y finales de agosto tuvimos 14 días con Rorcuales Comunes, durante un total de 20 salidas.
Los vientos abrazan literalmente a Tarifa. Los procedentes de las dos direcciones principales se llaman Levante y Poniente. En invierno, a veces hay viento frío del norte o del sudoeste.
Observar a un Rorcual Común siempre es algo muy especial, ya que no es muy habitual ver a esta ballena con barba. Dentro de las siete especies “regulares” del Estrecho de Gibraltar, es probablemente la ballena que menos veces vemos.
Contamos varios cientos de animales, principalmente hembras con sus crías. Entre ellos descubrimos también a un recién nacido que solo podía tener unos días de edad, porque todavía se notaban claramente las estrías cutáneas fetales.
El 7 de mayo vimos tres especies de delfines jugando juntos. Ni siquiera nuestros dos expertos a bordo, Katharina y José Manuel, podían recordar haberlos observado así alguna vez.
El mar estaba en calma, la visibilidad era muy buena y un grupo vivaz de varios cientos de Delfines Comunes y Listados nos dio la bienvenida, acompañándonos durante un buen rato y saltando de vez en cuando.
Cuando la fundación holandesa "Rugvin" se puso en contacto con nosotros para hablarnos de su programa de "Embajador de heces de ballena", al principio nos pareció descabellado y divertido.