Espectacular encuentro con cachalotes

por firmm Team

Texto: Alicia Lipsky, voluntaria de firmm; fotos: firmm

Parecía ser una salida muy normal en el Spirit. Durante los primeros 30 minutos vimos unos delfines mulares que surfeaban las olas delante de un carguero y unos calderones que nos observaban desde cierta distancia. ¡Entonces Katharina, que estaba en la cubierta del barco, descubrió el soplo característico de cachalotes unos cientos de metros delante de nosotros!

Nos acercamos y vimos que eran 3 cachalotes que flotaban en el agua acurrucándose el uno al otro. Normalmente los cachalotes bucean hasta 1.5 horas y luego tienen que respirar en la superficie para repostar bastante oxigeno antes de sumergirse de nuevo en la profundidad del océano. La culminación de los avistamientos de cachalotes en general es el momento cuando el animal gigante vuelve a sumergirse, porque baja vertical- y muy lentamente. Entonces nos suele enseñar su aleta caudal impresionante. Por eso esperamos pacientemente hasta que los tres chacalotes hubieran respirado bastante, con la esperanza de poder hacer unas fotos bonitas de las colas al sumergirse.

¡Pero en lugar de eso paso algo muy asombroso! Los cachalotes no se sumergieron, sino que se revolcaron en la superficie del agua, golpeando con la cola el mar y girando una y otra vez sobre sus espaldas, permitiéndonos ver sus vientres y bocas. Además vinieron familias enteras de calderones y delfines mulares de todas partes para observar el espectáculo que estaban dando los cachalotes y se reunieron al rededor de nuestro barco. Fue tan impresionante que uno no sabia en que dirección mirar. Por todas partes había delfines mulares y calderones que querían participar saltando en esta “reunión de mamíferos marinos”.

Encuentro de cachalotes, calderones comunes y delfines mulares 3 cachalotes juntos 3 cachalotes juntos a delfines mulares

Boca de cachalote abierta Cachalote golpeando con su aleta caudal Cachalote con la boca abierta

Había por lo menos 50 delfines mulares y 80 calderones y algunos de ellos se acercaron muchísimo a nuestro barco, buceando por debajo de nosotros. ¡Los calderones incluso habían traído a sus bebes!

A bordo del Spirit había un silencio total y un ambiente místico que no parecía de este mundo; todos se habían quedado sin aliento. Totalmente rodeados de tantos mamíferos marinos nos sentíamos como si no existiera el tiempo. No podíamos creer, que lo que estábamos viendo realmente estaba pasando. En cambio las ballenas y los delfines aparentemente tenían mucho que contarse. Desde el barco se podían escuchar sus sonidos, clics y silbidos. ¡Como nos hubiera gustado saber de que estaban hablando los animales!

Encuentro de cachalotes y calderones comunes frente a la proa Soplo de cachalote Encuentro

Cachalotes y calderones comunes Cachalotes y delfines mulares Neonato de calderón común

En algún momento Katharina recupero su voz y nos informo por altavoz, que se trataba de un apareamiento de cachalotes y que siempre hace falta un tercer animal que ayuda a la pareja de copular. ¡El espectáculo venía durando probablemente unas cuantas horas y los tres cachalotes no se sumergieron! Cada vez se acercaron más y más, entremedias estuvieron directamente delante de nuestra proa. Eso si que causo impresión; un cachalote mide unos 18 Metros y considerando que nuestro barco con una eslora de 16 m es más pequeño, no seria muy difícil para un cachalote el volcarnos. Pero los animales se mostraron muy pacíficos, no se dejaron molestar por nuestra presencia y nos permitieron experimentar este deslumbrante espectáculo.

Después de 3 horas tuvimos que regresar y con dolor en el corazón nos despedimos de los cachalotes, los delfines mulares y los calderones. Esta experiencia fue inolvidable para todos nosotros y estamos muy agradecidos por haber presenciado este apareamiento de cachalotes.

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