¡Cachalotes por doquier!

Ver un Cachalote no es nada extraordinario en esta época del año. Pero lo que vivimos hoy en la salida de las 13:00 supo a récord. Estábamos observando a un grupo de Calderones socializando junto a un Cachalote, cuando luego de que se fuera a pique, apareciera el típico soplo inclinado de otro a poca distancia. Salimos para observar también a este magnífico mamífero marino, antes de que desapareciera en las profundidades del Estrecho. Cuando finalmente buceó y nos dispusimos a seguir para encontrar otros animales, descubrimos otro soplo a media milla de distancia. Nos pudimos acercar solamente a 200 metros antes de que buceara pero como había aparecido otro Cachalote a otra media milla hacia el oeste seguimos viaje. También este ejemplar se dispuso a bucear a tiempo pero dio para ver desaparecer su majestuosa caudal en las aguas del Estrecho. No quedó mucho tiempo para digerir la experiencia ya que había aparecido otro Cachalote en la superficie. Pudimos esta vez acercarnos al cetáceo a algo menos de 200 metros. Lamentablemente nos seguía otro barco de avistamiento que no supo mantener una distancia respetuosa, el Cachalote reaccionó cambiando su dirección de nado pero aún así paso a 20 metros del barco susodicho. Como nos habíamos saciado de ver Cachalotes y no nos gustó lo que estábamos viendo, decidimos retirarnos para no estresar más al animal. Justamente en ese momento vislumbramos otro soplo. A pocos cientos de metros hacia el West nos aguardaba otro Cachalote. Cuando llegamos a la distancia de avistamiento de 100 metros, apareció otro más por la otra banda del barco, de manera que nos encontramos con un Cachalote de cada lado.
Cuando desaparecieron bajo el agua nos hicimos a la vuelta, concientes de haber vivido una experiencia extraordinaria.

Fotos: Carine Zimmermann

-casi-