Una gran sorpresa

Texto: Jessica Baum, fotos: firmm

El jueves 26 de junio algo sucedió que nadie esperaba. A las tres de la tarde embarcamos en busca de mamíferos marinos en el Estrecho de Gibraltar. El Spirit y el Fly Blue salieron del puerto a la vez. Lo que nos esperaba allí fuera en el océano era una sorprendente experiencia. Ya aquella mañana habíamos recibido llamadas de los pescadores locales diciendo que algunas orcas habían sido vistas.

Por supuesto, nosotros lo esperábamos, pero la naturaleza no se puede controlar. Normalmente para estas salidas programamos tres horas, porque tenemos que ir más lejos y toma más tiempo. Me quedé muy sorprendida cuando oí a Katharina Heyer anunciar: «Tenemos una gran sorpresa para vosotros». Primero pensé que se refería a rorcuales, que cruzan el Estrecho bastante rápido y por tanto, son difíciles de encontrar. Pero prosiguió: «Ahí tenemos a las primeras Orcas de esta temporada». Todos, los clientes y yo, nos quedamos muy sorprendidos y felices. Admirar a estos majestuosos animales en su medio, en libertad, es una experiencia muy especial.

  

En total vimos cinco Orcas. Dos hembras, un macho y dos más jóvenes, uno de ellos aún una cría muy pequeña. Parecía que las Orcas nos daban la bienvenida, porque no sólo golpeaban con sus aletas caudales el agua, sino que también estaban saltando completamente fuera, mostrándonos su gracia y elegancia.

    

Tuvimos la suerte de presenciar en vivo cómo quitaban un atún de los sedales de los pescadores locales, ya que una de las Orcas tenía uno enorme en la boca. Las Orcas estaban a la espera junto a los barcos de los pescadores, intentando saber cuando podían conseguir el siguiente atún.

Desafortunadamente, esta salida se acabó demasiado pronto, hacia las 16:30 tuvimos que empezar a volver hacia Tarifa, por estar bastante lejos del puerto!